Investigación de confianza para conocer el negocio del emprendimiento
Investigar no es solo hacer preguntas en un formulario o por cualquier otro medio.
El emprendedor en muchas ocasiones, siente la doble necesidad de conocer el mercado al que se dirigirá y no tener demasiado presupuesto para realizar un estudio de mercado profesional.
El problema común del que ya ha iniciado su negocio puede ser: tiene problemas de posicionamiento, problemas de captación de leads (prospectos), desconocimiento del cliente objetivo, de los indicadores básicos del negocio, no medir la calidad de su servicio, ni conocer los motivos de baja de sus clientes, etc. Con esta situación está claro que existe una gran necesidad de realizar una investigación de mercados.
Este es un caso real sobre un e-commerce que he tenido esta semana.
Después de la reunión inicial donde nos expusieron los problemas del negocio, les presentamos una propuesta de investigación de mercados completa, con distintas fases de trabajo: a) análisis de su base de datos para conocer y analizar sus indicadores básicos de negocio y perfil de cliente actual; b) fase de investigación cualitativa con entrevistas a potenciales clientes y otros usuarios del servicio, y c) una encuesta.
Cada fase aportará un análisis y visión de la situación del mercado, de las que extraemos conclusiones y recomendaciones prioritarias de acción. El estudio no es barato, pero el retorno sobre la inversión será el aspecto más importante a valorar al realizar la inversión en el estudio.
Después de revisar el presupuesto, muchos emprendedores para abaratar costes, se plantean realizar parte del estudio por su cuenta, sin el asesoramiento y conocimiento que le aportará un investigador. ¡Qué error tan grave!.
Entonces es cuando es necesario advertir que “solo hacer preguntas no es investigación…”
Porque investigar es “descubrir”, es analizar, sacar a la luz lo que desconocemos para encontrar una solución. Hasta aquí bien, si preguntas tienes respuestas, y puedes descubrir algo, puedes sacar temas desconocidos a la luz. Pero si no lo haces con el debido rigor, el rigor del método científico, en tu investigación puedes cometer graves errores. Puedes llegar a conclusiones erróneas sin saberlo. Puedes llegar a descubrir una irrealidad. Y esto es muy peligroso, porque sinceramente, basarás tu idea de negocio sobre una conclusión sin base.
No debemos confundir el acceso maravilloso que tenemos con las nuevas tecnologías a herramientas como las encuestas online, u otras que usamos en nuestras investigaciones. Con la aplicación del método riguroso que sigue una investigación para que los resultados sean válidos y fiables.
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